El pasado 5 de mayo durante un acto
en Budapest, el primer ministro húngaro, Viktor Orbán comparó, en un programa
de radio, la política exterior del
canciller democristiana alemana Angela Merkel con la ocupación nazi de
territorio húngaro en 1944, conocida como Operación Margarethe, declarando que
“los alemanes ya enviaron una vez a la
caballería; en forma de tanques”. Esta falta de sensibilidad por parte del
primer ministro se debió a un comentario realizado por Angela Merkel el cual dice
“se hará todo lo posible por llevar a Hungría por el buen camino, pero no
enviaremos ahora mismo a la caballería”.
El ABC nos muestra esta noticia desde un punto de vista a favor de la
canciller alemana, ya que es un comentario salido de tono del que no
tiene argumento ninguno para poder exponerlo, aunque haya sido por haberlo
malinterpretado. Tras estas declaraciones de Viktor Orbán, Berlín actuó en
consecuencia y expuso que “se trata de
una lamentable salida de tono, que claramente rechazamos”. El medio español
comenta que, ahora debido a esta situación la Hungría de Orbán se encuentra en
el ojo del huracán y la acusa de restringir la independencia del poder
judicial, de la libertad de expresión y de aprobar numerosas leyes
antidemocráticas. Estas acusaciones son, al fin y al cabo, igual de erróneas
que las dichas por el primer ministro ya que hacer publicidad de lo dicho por
él y, realizar una exclusión, según ABC, por parte de la Unión Europea como
castigo sólo aumenta la gravedad de lo sucedido.
Aunque en
esta ocasión el ABC ha ido con “pies de plomo” y no se ha decantado de una
forma más abierta por ninguno de los dos bandos del conflicto, sino que ha
lanzado pequeñas indirectas a favor del país germano.
Patricia Gómez Ortega
Patricia Gómez Ortega
